Entre los principales inconvenientes que la patronal encuentra para retomar la senda del crecimiento se sitúa la obligatoriedad de usar mascarillla durante la realización del ejercicio.
La crisis sanitaria ha provocado un agujero en las cuentas de los gimnasios españoles que tardará en ser rellenado. Al cierre obligado de los centros deportivos en los meses más duros de la pandemia, que rompió la curva ascendente de un sector en pro de la salud.